Para que la mucosa nasal no sufra hay que cuidarla de forma estable, con dosis y frecuencia de uso adecuadas y sustancia de alta calidad.
Tras su uso, realice un enjuague nasal suave con solución salina para eliminar cualquier resto de fármaco y reducir posibles daños. Utilice un pulverizador nasal o una olla Neti para irrigar suavemente cada fosa nasal. Además de enjuagar después del uso, es importante mantener el nivel de hidratación de las fosas nasales de forma regular.
La sequedad de las fosas nasales puede provocar irritación y daños. Hidrate regularmente las fosas nasales utilizando sprays o enjuagues nasales especiales con solución salina.
Deje que las fosas nasales se recuperen entre los episodios de consumo de drogas. El consumo frecuente puede provocar inflamación crónica y daños en los tejidos. Tomar descansos y utilizar métodos de administración alternativos puede ayudar a minimizar los daños.
Veo lo siguiente como la mejor opción para usted: dejar de usar por la nariz durante algún tiempo, hacer la recuperación (enjuague , hidratación, gotas con dexpantenol), cambiar el lote o el proveedor.
Si surgen complicaciones, acuda rápidamente al médico.