Alcohol Cannabinoids Red Debate: Alcohol y cannabinoides

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Alcohol y cannabinoides

El alcohol (etanol) actúa como depresor del Sistema Nervioso Central (SNC). Potencia el efecto del ácido gamma-aminobutírico (GABA), un neurotransmisor que inhibe la actividad cerebral e inhibe el glutamato, que estimula el SNC. También estimula la liberación de dopamina, lo que provoca la euforia comúnmente asociada a la intoxicación. El alcohol se absorbe en el tracto gastrointestinal y se distribuye por todo el cuerpo, afectando a casi todos los sistemas.


Loscannabinoides sintéticos están diseñados para imitar al tetrahidrocannabinol (THC), el compuesto activo del cannabis, actuando sobre los receptores cannabinoides (CB1 y CB2) del cerebro. Tienen una gran afinidad por el receptor CB1, que se encuentra principalmente en el SNC y contribuye a sus potentes efectos psicoactivos. Algunos cannabinoides sintéticos pueden afectar a la liberación de serotonina, influyendo en el estado de ánimo y la percepción.


La interacción entre el alcohol y los cannabinoides sintéticos implica mecanismos complejos dentro del cerebro y el cuerpo, lo que provoca efectos potencialmente impredecibles y peligrosos.

Algunos consumidores informan de un aumento de las sensaciones placenteras debido a la intensificación de los efectos psicoactivos al combinar estas sustancias. Pero para esta combinación, existen muchos peligros y reacciones secundarias que se superponen sólo a un potencial y pequeño aumento de este tipo de beneficios.

• Deterioro cognitivo: Ambas sustancias pueden deteriorar el juicio, la memoria y la atención. Estudios modernos demuestran que el etanol potencia el deterioro de las funciones sensoriomotoras y de memoria inducido por los cannabinoides.
• Malestar psicológico: La ansiedad, la paranoia y la psicosis pueden ser más probables con la combinación debido a la sobreestimulación de las vías de recompensa y estrés del cerebro.
• Riesgo cardiovascular: El aumento de la frecuencia cardíaca y la presión arterial puede resultar de esta combinación, lo que plantea un riesgo para las personas con enfermedades del corazón.
• Potencial de adicción: El uso combinado puede sobreestimular el sistema dopaminérgico, conduciendo potencialmente a sensaciones más intensas de euforia, pero también a un mayor riesgo de adicción.
• Toxicidad aguda: El riesgo de toxicidad aguda y sobredosis es mayor, ya que la combinación puede provocar vómitos, depresión respiratoria grave y problemas cardíacos.
• Riesgo de convulsiones: Con regular frecuencia, existen datos sobre el desarrollo de síndrome convulsivo en personas que han tomado cannabinoides sintéticos, incluso en combinación con alcohol.
• Reacciones imprevisibles: Los cannabinoides sintéticos no son una única sustancia, sino un grupo de sustancias químicas con efectos variables, lo que hace que su interacción con el alcohol sea altamente impredecible y peligrosa.

A diferencia del alcohol, que puede dosificarse con bastante éxito, los cannabinoides tienen un efecto potente y difícil de predecir, que en combinación con la intoxicación etílica dará lugar a un pasatiempo desagradable, que puede verse agravado por reacciones secundarias graves. Como ya se ha mencionado, los cannabinoides son todo un grupo de sustancias y, por el momento, es sencillamente imposible predecir de forma fiable los resultados de una combinación de este tipo.

Teniendo todo esto en cuenta, recomendamos evitar esta combinación bajo cualquier condición.