La fabricación de cocaína alcanzó niveles récord en 2019 a pesar de que el crecimiento perdió impulso.
La producción de la fabricación mundial de cocaína se duplicó entre 2014 y 2019 para alcanzar unas 1.784 toneladas (expresadas al 100% de pureza) en 2019, el nivel más alto jamás registrado.
Al mismo tiempo, el crecimiento de la producción de fabricación de cocaína se ha ralentizado, lo que apunta a una tendencia a la estabilización. En comparación con el año anterior, la fabricación mundial de cocaína aumentó un 37% en 2016, un 23% en 2017, un 5% en 2018 y un 3,5% en 2019.La tendencia hacia la estabilización ha sido principalmente el resultado de los cambios en el cultivo del arbusto de coca, a pesar de los continuos aumentos en la productividad (rendimiento por hectárea).
Tras años de aumento, el cultivo de arbusto de coca disminuyó en 2019.
Tras una tendencia masiva al alza en el período 2013-2017, durante el cual la superficie de cultivo de arbusto de coca se duplicó con creces, el tamaño de la superficie de cultivo de arbusto de coca se estabilizó en 2018 y luego disminuyó -por primera vez en años- un 5% en 2019. Esto se debió principalmente a la disminución notificada por Colombia (9%); la superficie de cultivo de arbusto de coca se mantuvo estable en el Perú y aumentó en el Estado Plurinacional de Bolivia (un 10%). En 2019, Colombia siguió representando la gran mayoría de la superficie mundial dedicada al cultivo de arbusto de coca (dos tercios), el Perú representó algo menos de una cuarta parte y el Estado Plurinacional de Bolivia, el 11%.
En 2020, a pesar de algunas interrupciones en la cadena de suministro de la fabricación de cocaína al comienzo de la pandemia COVID-19, no parecía que el cultivo de arbusto de coca en ninguno de los tres países se viera afectado significativamente por las restricciones aplicadas en respuesta a la pandemia.
La producción de la fabricación mundial de cocaína se duplicó entre 2014 y 2019 para alcanzar unas 1.784 toneladas (expresadas al 100% de pureza) en 2019, el nivel más alto jamás registrado.
Al mismo tiempo, el crecimiento de la producción de fabricación de cocaína se ha ralentizado, lo que apunta a una tendencia a la estabilización. En comparación con el año anterior, la fabricación mundial de cocaína aumentó un 37% en 2016, un 23% en 2017, un 5% en 2018 y un 3,5% en 2019.La tendencia hacia la estabilización ha sido principalmente el resultado de los cambios en el cultivo del arbusto de coca, a pesar de los continuos aumentos en la productividad (rendimiento por hectárea).
Tras una tendencia masiva al alza en el período 2013-2017, durante el cual la superficie de cultivo de arbusto de coca se duplicó con creces, el tamaño de la superficie de cultivo de arbusto de coca se estabilizó en 2018 y luego disminuyó -por primera vez en años- un 5% en 2019. Esto se debió principalmente a la disminución notificada por Colombia (9%); la superficie de cultivo de arbusto de coca se mantuvo estable en el Perú y aumentó en el Estado Plurinacional de Bolivia (un 10%). En 2019, Colombia siguió representando la gran mayoría de la superficie mundial dedicada al cultivo de arbusto de coca (dos tercios), el Perú representó algo menos de una cuarta parte y el Estado Plurinacional de Bolivia, el 11%.
En 2020, a pesar de algunas interrupciones en la cadena de suministro de la fabricación de cocaína al comienzo de la pandemia COVID-19, no parecía que el cultivo de arbusto de coca en ninguno de los tres países se viera afectado significativamente por las restricciones aplicadas en respuesta a la pandemia.
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